
Desde la escuela nos enseñan que el ciclo de la vida es nacer, vivir y morir. Pero esa última etapa es difícil de entender. Conocemos la palabra muerte y probablemente la entendamos pero nunca seremos capaces de asimilarla y mucho menos estamos preparados para afrontarla.
Mi mamá no murió, se quedó en mi corazón y permanece en mi memoria
No queremos pensar que te has ido a pesar del vacío que te queda; solo queremos ver que te has quedado dormido y que el despertar del sueño te has olvidado.
No queremos pensar en la tristeza o el dolor en el que nos has sumergido: queremos disfrutar de la belleza que hemos tenido con solo tenerte.
Para tu familia fuiste el gran pilar en el que siempre pudimos apoyarnos. Nos enseñaste tu humanidad y siempre tuviste tiempo para amarnos.
Mamá tu recuerdo siempre vivirá entre nosotros
Para tu esposo, un hombre ejemplar, porque nunca ha dejado de quererte y sabes que aunque no vuelvas jamás él podrá olvidarte.
Para tus nietesitos fuiste el motivo de un tierno amor, que culmina con el amor y ellos siempre sentirán dentro de ellos la voz amable de su fiel "abuelita".
No te has ido, aquí siempre estarás dispuesto a intervenir para ayudarnos y en ese "cielo" nos harás un lugar para que algún día nos volvamos a encontrar.
Si tu mamá esta viva valórala porque
Obtenemos una nueva perspectiva de sus vidas. Si enaltecíamos a nuestros padres y madres cuando éramos pequeños, ahora de mayor vemos sus defectos e fallas.
En el caso de fallecer uno de los padres, por ejemplo a su madre, existe una gran oportunidad para aprender más sobre ella desde la perspectiva y las experiencias de su padre sobreviviente.
Cuando nos hacemos más mayores, nuestra relación con nuestros padres cambia y continúa. Antes de que un padre se vaya, comprendemos intuitivamente que algún día morirá.
Pero comprender y pronosticar no nos prepara para el dolor que sentimos cuando, como adultos, perdemos a un padre.
Al reflexionar sobre la memoria de su ser querido, ya sea que esté solo o con un padre sobreviviente como se mencionó anteriormente, está comenzando el viaje por las etapas familiares del duelo.